Vuelvo hacia las raíces de un vos
donde encuentro tu rostro ciego de mí
(ya se, está difícil)
me caigo de nuevo a la cólera bruta de encontrarte y carajo perderte
como dijo alguna vez Manolito Benedetti (y acá se podría volver todo tan sencillo)
donde encuentro tu rostro ciego de mí
(ya se, está difícil)
me caigo de nuevo a la cólera bruta de encontrarte y carajo perderte
como dijo alguna vez Manolito Benedetti (y acá se podría volver todo tan sencillo)
voy a los retazos de un cuerpo de unas manos de unos dedos fríos
aglomerados en torno a tu presencia estéril
donde difícilmente podrías reconocerte (y dudo también que estés entendido)
(y acá quiero que me leas sonriendo y levantando los hombros)
mis días lo de siempre, permutando esperanzas por la mañana en el medio del té
sin el dibujo de tu mano donde rescatar las tostadas
y a la hora del mediodía los ojos revoloteando tu risa nula
mientras yo voy navegando en papelitos (como éste)
colmados de vos sin dibujarte en realidad
y al caer la tarde son tantas las palabras llenas con tu nombre
que resuenan desde lo profundo de mis botas (dejate la sonrisa quieta y seguí)
vos así nomás sin peldaño hacia mí que me atraviese el alma
tranquila vas caminando los días enteros del mes
(y acá dale con toda la sinceridad y la ternura)
en cambio yo con solo poemas viejos prendidos al buso
cosa de encontrarte algún lunes cuando llueva
y decidas quedarte conmigo
porque vos también buscabas
o solamente porque te pintó.
porque vos también buscabas
o solamente porque te pintó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario